Izamal, el célebre Pueblo Mágico de Yucatán, se alista para vivir una de sus temporadas turísticas más intensas durante la Semana Santa, con una programación vibrante de actividades que no solo buscan atraer a miles de visitantes, sino también transformar la forma en que se experimenta este destino lleno de historia y misticismo.
Consciente de que el turismo fugaz ha limitado durante años el verdadero potencial económico del municipio, la alcaldesa Melissa Puga Rodríguez ha puesto en marcha una estrategia integral para alargar la estancia de los visitantes, consolidar a Izamal como un epicentro cultural del sureste mexicano y, al mismo tiempo, detonar la economía local.
De sitio de paso a destino prolongado
“Durante mucho tiempo la gente venía, visitaba el Convento de San Antonio de Padua, subía a la pirámide Kinich Kakmó y se iba”, comenta la alcaldesa. “Hoy estamos trabajando para cambiar esa dinámica. Queremos que la gente se quede, que viva Izamal, que se relacione con su cultura y su gente”.
Para ello, el ayuntamiento ha diseñado una oferta turística pensada para enriquecer la experiencia del visitante: conciertos, eventos deportivos y actividades culturales de fin de semana se han convertido en el nuevo rostro de Izamal. Entre los eventos destacados de esta temporada destacan el prestigioso Rally Maya, un maratón, una carrera ciclista, y el esperado concierto de la artista estadounidense Cat Power, que promete atraer público nacional e internacional.
Además, en una apuesta por integrar el folclor de otras regiones, la administración municipal ya trabaja en negociaciones para llevar a cabo en Izamal una edición especial de la Guelaguetza oaxaqueña. Este evento, de concretarse, representaría dos semanas adicionales de actividades artísticas y culturales, con un fuerte impacto turístico.
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Turismo como motor económico
El auge de estas iniciativas ya se refleja en los indicadores locales: la ocupación hotelera se encuentra al 100% para toda la Semana Santa. Con alrededor de 700 habitaciones disponibles, el municipio empieza a ver un creciente interés de inversionistas en desarrollar nueva infraestructura hotelera.
“Estamos proyectando la apertura de nuevos hoteles y trabajamos en un plan de ordenamiento urbano que permita un crecimiento ordenado. No se trata de expandirnos sin control, sino de hacerlo con visión”, aseguró Puga Rodríguez.
En paralelo, se están fortaleciendo los servicios turísticos existentes. Uno de los proyectos prioritarios es capacitar a más guías especializados en historia y cultura maya, con el objetivo de que los visitantes no solo se lleven la postal del amarillo característico de Izamal, sino también una comprensión más profunda de su legado ancestral.
“Izamal fue un centro ceremonial donde se veneraba a Itzamná, una de las deidades más importantes de la cosmogonía maya. Cada rincón de esta ciudad tiene una historia que contar”, subraya la edil.
Reanimación del comercio local
El beneficio de esta revitalización turística también se extiende al comercio local, especialmente al sector restaurantero, que ha vivido altibajos económicos en semanas recientes. Sin embargo, los eventos pasados ya han demostrado que la presencia de visitantes genera una derrama directa en los negocios de la zona.
“Tenemos una oferta gastronómica de gran calidad que muchas veces pasa desapercibida. Por eso, buscamos conectar a los turistas con estos espacios y ofrecerles una experiencia completa que incluya lo cultural, lo histórico y lo culinario”, enfatizó Puga Rodríguez.
Más allá de los números y la ocupación hotelera, la visión de esta administración apunta a algo más profundo: consolidar un modelo de turismo sostenible, donde la comunidad local sea parte activa del desarrollo económico y donde el visitante se lleve algo más que una foto.
