El municipio de Chumayel da inicio a las celebraciones tradicionales en honor al Santo Cristo de la Transfiguración, marcando un momento de fervor religioso y unión comunitaria. Las festividades, que se extenderán hasta el 5 de mayo, se caracterizan por la preservación de costumbres ancestrales y la participación activa de la comunidad.
El “Dzan Cebolla” y el inicio de los festejos
Como preámbulo a la fiesta, se llevó a cabo la emblemática ceremonia del “dzan cebolla“, una tradición arraigada que simboliza la preparación y el trabajo en conjunto. Este ritual, realizado en el hogar del vecino Marcos Itzá, consiste en la remoción y curtido de cebolla morada en agua caliente con naranja agria. La cebolla, preparada tres días antes del 23 de abril, servirá como acompañamiento para la carne que se repartirá a los miembros del gremio de la Alborada.
Además, el presidente municipal Ricardo Peraza encabezó el arranque de la medición de palcos del ruedo, donde se llevarán a cabo las tradicionales corridas de toros, uno de los atractivos más esperados de la festividad.
Devoción y tradición, Chumayel, el corazón de la celebración
La fiesta patronal de Chumayel gira en torno a la devoción al Santo Cristo de la Transfiguración, venerado desde al menos 1880 bajo diversas advocaciones locales. Además, las celebraciones incluyen misas solemnes, procesiones, la bajada de la imagen del Cristo y un novenario.
Durante la bajada del Cristo, los custodios abren el nicho principal mientras el mariachi entona “Viva Cristo Rey“. Los fieles expresan su devoción a través de ofrendas de flores, arreglos, velas y estampas de milagros, creando un ambiente de fervor y recogimiento.
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La celebración anual al Cristo de la Transfiguración en Chumayel es un encuentro significativo de fe, tradición y comunidad. A través de rituales ancestrales y expresiones de devoción, los habitantes de Chumayel fortalecen sus lazos y preservan su identidad cultural. La festividad, que combina elementos religiosos y festivos, ofrece a los visitantes una oportunidad única para sumergirse en la riqueza de las tradiciones yucatecas.