La relación comercial entre México y Estados Unidos enfrenta una nueva tensión tras el anuncio del presidente estadounidense Donald Trump sobre la imposición de aranceles del 25 % al acero y aluminio mexicanos. Ante esta medida, la presidenta Claudia Sheinbaum dejó claro que su gobierno está dispuesto a tomar represalias en caso de que no se llegue a un acuerdo antes del 2 de abril, fecha límite establecida por la administración estadounidense.
Un plazo incierto y negociaciones en curso
Trump decidió otorgar una prórroga hasta el 2 de abril para los aranceles dirigidos a Canadá y México en ciertos productos cubiertos por el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). No obstante, el acero y el aluminio continúan sujetos a las tarifas impuestas por el gobierno estadounidense, lo que ha generado incertidumbre en la industria mexicana.
Desde el Salón de Tesorería, Sheinbaum destacó que su administración trabaja activamente para evitar que estas medidas afecten a la economía nacional.
“Se está trabajando con ellos, es importante porque ellos tienen propuestas, no todas las conocemos hasta que no llegue el 2 de abril. Nosotros lo que estamos haciendo en estas reuniones es brindar toda la información sobre las afectaciones que tendría para Estados Unidos y para México el poner aranceles nuevamente”, explicó.
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Diálogo con empresarios y el gobierno estadounidense
Para enfrentar esta situación, el gobierno mexicano ha intensificado el diálogo con diversos sectores industriales y con la administración de Trump. La mandataria informó que el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, mantiene una comunicación constante con su homólogo estadounidense, Howard Lutnick, secretario de Comercio. Además, aseguró que su administración trabaja de la mano con representantes de la industria automotriz, así como de los sectores de acero y aluminio, quienes han manifestado su preocupación por las posibles repercusiones económicas.
Sheinbaum fue tajante al señalar que, si el 2 de abril no se logra un acuerdo con Estados Unidos, su gobierno tomará medidas inmediatas el 3 de abril para responder a las afectaciones comerciales.
“De acuerdo con lo que (el Gobierno de Donald Trump) presente el 2 de abril, nosotros anunciaremos las medidas que debamos tomar”, afirmó.
Impacto del T-MEC y las restricciones comerciales para México
A pesar de que el T-MEC ha sido un pilar fundamental en la relación comercial entre México, Estados Unidos y Canadá, no todos los bienes están protegidos por el tratado. Durante su primer mandato, Trump renegoció el acuerdo para reemplazar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), asegurando mejores condiciones para los productos estadounidenses. Sin embargo, las recientes medidas arancelarias demuestran que la administración actual sigue imponiendo barreras a sectores estratégicos para México.
Mientras tanto, los empresarios mexicanos observan con cautela el desenlace de estas negociaciones. La posible implementación de aranceles de represalia por parte del gobierno de Sheinbaum podría impactar tanto a exportadores como a consumidores, generando un nuevo episodio de tensión comercial entre ambos países.
Se espera que en los próximos días se conozcan los detalles de las negociaciones entre los altos funcionarios de México y Estados Unidos. La postura firme de la presidenta Sheinbaum sugiere que, si Trump insiste en aplicar tarifas al acero y aluminio mexicano, su administración no dudará en responder con medidas equivalentes.